Jamal Adams cruzará todo el país para unirse a Seattle Seahawks, su nuevo equipo, luego de que el club de la NFC Oeste cediera a sus selecciones de primera ronda de los reclutamientos de 2021 y 2022, a su pick de tercera ronda de 2021, y al safety Bradley McDougald, de acuerdo con información de John Boyle, del portal oficial de los Seahawks.
Además de enviar a su mejor defensivo, que según Brian Costello, de New York Post, no querían traspasarlo, los Jets entregaron a la selección de cuarta ronda de 2022 a Seattle.
El intercambio de Adams tiene sus raíces de meses atrás. El safety All-Pro había pedido una extensión de contrato que, según contó, el equipo cumpliría en enero de este año. La relación de Adams con los Jets, principalmente con el entrenador Adam Gase, se desgastó al punto que solicitó abiertamente un intercambio, petición a la cual anexó una lista de los equipos los que estaba dispuesto a irse. Seattle aparecía en ella.
Adams fue seleccionado por los Jets en 2017 como el sexto pick global del reclutamiento colegial. Egresado de LSU, el defensivo secundario se hizo de un nombre rápidamente en la liga y en 2019 tuvo su mejor año hasta el momento con 6.5 capturas a mariscales de campo y 75 tecleadas combinadas, así como un par de intercepciones.
El safety llegará a Seattle, donde años atrás se creó una defensiva secundaria de ensueño, Legion of Boom, donde Earl Thomas era el safety a cargo de la defensa. Tras su lesión de la pierna en 2018, el equipo se desentendió de él y terminó merodeando la zona profunda del M&T Bank Stadium con Baltimore Ravens el año anterior.
Según Jeremy Fowler, de ESPN, los 49ers y los Cowboys estaban involucrados en las charlas por el safety.
Freno para el rival
La llegada de Adams supone un gran refuerzo para los Seahawks para parar a uno de los ala cerradas de mayor impacto de la liga dos veces al año. Se trata de George Kittle, de San Francisco 49ers, quien en el juego para capturar el banderín de la NFC Oeste, en la Semana 17, atrapó siete pases (en siete intentos) para 86 yardas contra Bradley McDougald, además de imponer su físico para evitar largos avances de DeAndre Hopkins, cuando los Seahawks se enfrenten a los Cardinals.
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