La situación se complicó en la NFL. Mientras el gobernador de Texas Greg Abbott ya permitió aficionados en los estadios de la demarcación, múltiples jugadores de Cowboys y Texans, con Ezekiel Elliott a la cabeza, dieron positivos por coronavirus.
Ante esto, un grupo de entrenadores en jefe de la liga han levantado la voz para manifestar preocupación de cara a la campaña 2020, la cual está a poco más de tres meses de arrancar. De acuerdo con información de ESPN, un coach, quien permanece en el anonimato, calificó el problema como "aterrador".
Asimismo, otro entrenador en jefe sugirió que el comisionado Roger Goodell debería aplazar el inicio de la temporada, previsto para el 10 de septiembre. Un coach más cuestionó la decisión de jugar la campaña en medio de la crisis sanitaria.
No obstante, los recientes contagios en las organizaciones texanas no implican, por el momento, una amenaza real para el núcleo de la NFL. De acuerdo con reportes, ninguno de los jugadores infectados han asistido a las instalaciones de sus organizaciones, con lo que la propagación del agente dentro de la liga aún está descartado.
Cabe destacar que los contagios no son un caso aislado al deporte profesionales. Diferentes organizaciones de la NCAA informaron casos confirmados de coronavirus en sus atletas, quienes comenzaron a reportarse en recientes días para comenzar con programas de entrenamiento.
Goodell mantiene todo igual
Por el momento, el comisionado no ha manifestado la postura de la liga con relación al contagio masivo en Texas, pero de acuerdo con sus más recientes declaraciones, la NFL aún espera iniciar los campamentos de entrenamiento en tiempo y formaur, aunque también analiza la posibilidad de recortar la pretemporada a dos encuentros.
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