Cuando uno habla de posibles contagios de COVID-19 en la NFL uno piensa en los jugadores, que son atletas de alto rendimiento con edades que oscilan entre los 23 y los 40 años, así que suenan como un grupo que no debería tener problemas mayores en caso de contraer la enfermedad. Pero hay algunas personas directamente relacionadas con la liga que no están en ese grupo tan favorable.
Bruce Arians, por ejemplo. El coach de los Buccaneers, que cumple 68 años en Octubre, ha padecido cáncer de próstata, de piel y de riñón. En caso de contraer COVID-19 estaría en severo riesgo de enfrentar un problema serio, por lo que él sigue debatiendo qué tan cerca estará de sus jugadores durante el training camp y los partidos de la temporada regular.
"Bruce Arians sigue, por lo último que escuché, tratando de decidir qué tan activo va a estar en términos de proximidad, proximidad física, con sus jugadores. Está en el grupo de alto riesgo. Yo estoy en el grupo de alto riesgo. Estás en los sesenta, has tenido cáncer o te has recuperado de él." dijo Chris Mortensen en una conversación en SiriusXM NFL Radio.
Obviamente el caso de Arians es complicado, y precisamente por eso debe ser cuidadoso con su salud. Y mientras los jugadores discuten la posibilidad de aplicar el "opt-out" (perderse de manera voluntaria la temporada), esta opción debería estar en la mesa para personas en grupo de riesgo como Arians.
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