Para los San Francisco 49ers la campaña pasada estuvo marcada por las lesiones. Y, desafortunadamente para los Niners, la historia se ha repetido en la offseason.
Tres jugadores se lesionaron durante las siete prácticas voluntarias que el equipo sostuvo durante mayo y principios de junio.
El running back Jeff Wilson Jr. (rodilla), el liniero ofensivo Justin Skule (rodilla) y el back defensivo Tarvarius Moore (tendón de Aquiles) sufrieron lesiones en los entrenamientos voluntarios. Skule y Moore están fuera toda la temporada.
Lo de Wilson ni siquiera fue en el campo, pues estaba sentado en una silla en el locker de los 49ers y se lastimó cuando trató de levantarse y su rodilla quedó en una posición incómoda.
Este martes, el coach Kyle Shanahan habló de las lesiones, que no han dejado en paz a su equipo.
"Tres lamentables lesiones, dos en el campo. Creo que lo más duro es que dos fueron en el campo", dijo Shanahan. "Tuvimos un campamento limpio, nadie sufrió una lesión grave como esa. Y luego tuvimos a dos jugadores en tres jugadas con Tarvarius y Skule. Eso fue un poco deprimente. Siempre odias ver eso, pero el año pasado no tuvimos una temporada baja, perdimos a cuatro personas antes de que comenzara el campo de entrenamiento".
Shanahan se refiere a los wide receivers Deebo Samuel (fractura en el pie) y Richie James (fractura de muñeca), y a los cornerbacks D.J. Reed (pectoral desgarrado) y Teez Tabor (fractura en el pie).
Luego, durante la campaña regular perdieron a Nick Bosa (Novato Defensivo del Año en 2019), Solomon Thomas y Jalen Hurd con lesiones en ligamentos de rodilla; Ezekiel Ansah también se perdió gran parte de la temporada con un problema en el bíceps, entre muchas otras lesiones.
"Es parte de la vida, tenemos a dos personas lesionadas en las prácticas voluntarias. Y es muy desafortunado porque esos dos muchachos estaban teniendo una gran práctica y Jeff se lesionó antes de que comenzara el entrenamiento", lamentó Shanahan.
La buena noticia para la defensa de los gambusinos es que Bosa se recupera satisfactoriamente, aunque por el momento no ha podido entrenar al parejo de sus compañeros.
"No puede participar en muchas cosas porque todavía se está rehabilitando, pero ha estado aquí toda la semana y sí, ha estado bien", reconoció Shanahan.
En 2019, Bosa fue segundo con el equipo con nueve capturas de quarterback. De hecho, el entonces novato tuvo siete sacks en sus primeros siete juegos en la NFL, con lo que empató un récord de la liga desde que las capturas son contabilizadas, en 1982.
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