Los veteranos reportaron al training camp de los Green Bay Packers y todas las caras conocidas estuvieron ahí, incluido el quarterback Aaron Rodgers.
Rodgers, quien ha dicho estar disconforme con la manera en la que opera la gerencia general del equipo, llegó este martes a las instalaciones del Lambeau Field, con una playera de "The Office", lentes oscuros, una mochila a la espalda y una sonrisa a medias.
El quarterback, según reportes, ahora debe cerrar un acuerdo que incluye la anulación de su último año del contrato con los Packers y que significa un posible canje al final de la temporada 2021.
Al reportar al training camp, Rodgers evita ser multado con 50,000 dólares por cada día de ausencia, pero es probable que no entrene hasta que el acuerdo sea firmado, reportó ESPN.
Rodgers ganó su tercer MVP la campaña pasada, cuando pasó para 4,299 yardas, 48 touchdowns y cinco intercepciones.
"Amo al staff de coaches, amo a mis compañeros de equipo, amo la base de fanáticos en Green Bay. Increíbles 16 años", dijo Rodgers a finales de mayo. "Se trata de la filosofía y tal vez de olvidar que se trata de las personas que hacen que las cosas funcionen. Se trata de carácter, es la cultura, se trata de hacer las cosas de la manera correcta".
En la que será su decimoséptima campaña con los Packers, Rodgers necesita nueve pases de touchdown para superar a Dan Marino (420) y 10 a Philip Rivers (421) y ubicarse en la quinta posición de la historia de la NFL. Rodgers ocupa el séptimo lugar de todos los tiempos con 412 touchdowns.
Ahora que Rodgers está de regreso, los Packers cortaron al veterano Blake Bortles, firmado en mayo como medida de emergencia.
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